martes, 10 de febrero de 2009

Optimismo

El Domingo tuve que llevarme el portátil de Marc al trabajo para acabar de contestar unas preguntas para la universidad. Cuando acabé me puse a curiosear una carpeta que ponía "Fotos" y encontré recuerdos de cuando comenzábamos a salir.

Cuando nos conocimos, acababa de pasar por una larga enfermedad. Comenzaba de nuevo una vida normal, tenía pelo de nuevo (esto puede parecer una nimiedad, pero hasta que no te quedas calvita no te das cuenta de cuanto apreciabas todos y cada uno de tus pelos) y me encontraba bien. No, mejor dicho, me encontraba mejor de lo que me había encontrado en la vida. Físicamente estaba como antes de la enfermedad. Mentalmente, tenía un equilibrio que jamás antes había alcanzado.

De alguna manera, tenía la sensación que todo lo que pudiera pasar en mi vida, lo bueno y lo malo, era algo transitorio. Así que cuando algo no me salía bien o alguien no me hacía todo el caso que yo quería, no me preocupaba. ¿Para qué? Sorprendentemente, esta actitud, lejos de exasperar al resto, les atraía. A la gente que me rodeaba les gustaba que siempre le viera el lado positivo al asunto. Pues así me veo en las fotos que encontré: con una sonrisa en todas y cada una. Y así recuerdo aquella temporada.

Con el tiempo se me ha ido borrando la sonrisa perenne (no os penséis que ahora soy infeliz, tiene más que ver que aquella temporada era de subidón ficticio). Aún veo la parte positiva de las cosas y si peco de algo es de confiada. Lo que no quiero perder nunca, lo que quiero mantener siempre en el centro de mi pensamiento es todo lo que aprendí de aquella experiencia: que de todo se sale. Mejor o peor, pero de todo se sale.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

:__)

Chasky dijo...

Y que jamás pierdas ese optimismo, supongo que una experiencia así tiene que marcar muchísimo el resto de tu vida.

Así que ni se te ocurra perder nunca esa sonrisa, que a pesar de momentos chungos en general la vida es estupenda.

Wendeling dijo...

Yo también aprendí a lo bestia que la vida merece ser vivida y disfrutada, pase lo que pase.

Gracias por enseñarnos tu manera de enfrentarte a ella, me encanta.

Besos de una maia.

Cactus dijo...

Me encanta leerte por eso mismo, porque siempre escribes con mucho optimismo y se nota en cada palabra que leo.

Nunca lo pierdas porque es un valor muy importante hoy en día.

Un besazo guapa.

MAFALDA dijo...

Me encanta la gente que mira con una sonrisa a la vida y se enfrenta a ella con optimismo...no lo pierdas nunca e intenta transmitirlo a la gente, no hay nada mas bonito que cruzarte con un desconocido por la calle, que se crucen las miradas y que te sonria..no te ha pasado nunca??terminas sonriendole tu tambien...

Un besazo enorme...o mejor ...una sonrisa sincera!!


(P.D:Por cierto, puedes saltarte las normas con el premillo que te he mandado..espero que nadie se keje..jejeje)

Mary Lovecraft dijo...

Qué sabias tus palabras y tu forma de ver la vida...

a mí me gusta también pensar y sentir así, desde luego es lo que nos llevaremos, lo vivido y qué mejor que siempre sea positivo, ¿verdad?

un beso